Gastgebruiker
26 juni 2023
Hotel nuevo, espectacular villas grandes con vistas increíbles y piscina privada. Colchon, sofá y amacas muy cómodas. De sueño.
Servicio excelente y comida rica, la zona es muy tranquila pero abajo hay una parada de taxis y en 5 minutos estás en el centro de Sengigi.
El masaje en el Spa fue excelente.
Lo menos agradable no tiene que ver con el hotel, sino que en la misma colina hay una mezquita muy activa con altavoces, no solo se oye la música de la hora de rezos desde las 4am (que tiene encanto) sino que se escuchan las oraciones y cantar durante horas y horas. Es difícil descansar y relaj**** así.
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